Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de abril, 2013

Una raya más al tigre de la pintora

A Casandra Sabag Hillen Desolada, sin el tigre, la casa calla. Mustio silencio que reclama. No hay quien responda al recuerdo del eco de sus feroces andanzas, el tigre brincó por la ventana, por la promesa de sol de primavera, a la seducción de los olores de las tiernas presas. Cansado de sus vueltas por la estancia, de jugar a la criatura doméstica, de hacerse la manicura sobre los sillones de mimbre de la terraza. El tigre, al saltar, rompió los vidrios de la ventana, sobre el charco de esquirlas, se ha herido una pata. El tigre sangra. Sobre praderas o bosques o entre las selvas asfálticas, traza la ruta roja de sus pasos libres, con el polvo de los caminos cicatriza sus ansias. Por la casa, entra el viento desde la ventana quebrada. Huele a vidrio roto, a eco de estruendo, a sangre de tigre aun fluyendo. Pero debajo de todo eso, a pesar de los afanes del viento, se germina el inconfundible olor del silencio. Cuando no se escucha nada, la memoria busca, desesperada, con qué ll